Vengo aquí a desempolvar el blog, porque llevo visitándolo con nostalgia durante este año y medio de descanso, y por fin me he decidido a retomarlo. He hecho examen de conciencia, de porqué no pude seguir tirando de él estos casi dos años y cuáles son mis razones para continuar. Y voy a contároslas.
No funcionó porque mi vida dio un giro de 180° y me encontré sin tiempo para nada. Que si hubiera sido una de esas personas que saben organizarse, bien, pero no, nunca lo he sido. Ahora empiezo a manejarme mejor. En la última entrada os comentaba que había empezado a estudiar un master en Michigan pero que quería seguir leyendo por placer. Bueno, eso no ha sido posible hasta hace poco, y el mayor fallo que tuve fue plantearme la misma rutina que cuando tenía tiempo. Siendo realistas, no puedo publicar una vez a la semana; si me exijo eso probablemente en cuanto pasen dos semanas mis buenos propósitos se volverán a estancar. Y sin embargo, una vez al mes me parece poco. Siento que tengo demasiadas ganas de contaros cosas, que los hilos de Twitter no dan para tanto, así que voy a dejarlo en dos entradas al mes.
Ahora, ¿de qué voy a hablaros? Pues… De varias cosas. Este blog sigue tratando de literatura porque hablar conmigo es hablar de literatura.
Libros: Aquí irán dos tipos de libros. A veces ocurre que me gustan los libros de clase y bueno, aunque los haya leído todo rápido para hacer el examen correspondiente me apetece contaros qué tal son, por si os pica el gusanillo. Y por otro lado, los libros-hobby. Aquí hago un inciso porque os aviso que solo irán libros de autoras. Mi propósito este año es sumarme a la propuesta de «Leo autoras» así que solo os reseñaré de ellas. Más adelante expondré las razones que me llevan a ello, pero las cosas de una en una
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Escritores: No sé si os he contado que escribo o que me peleo con el Scrivener para que los borradores que salen de ahí no les arranquen los ojos a mis lectores betas. El tema es que este último año me he paseado mucho por otros blogs con consejos para escritores y he aprendido mucho de ellos. De ellos, de los cursos de escritura en los que estoy y de mi propio proceso de escribir. Así que, por un lado, pensé que sería interesante el aportar mi granito de arena y, por otro lado, reforzarme a mí misma las ganas que tengo de cumplir ese sueño que, durante un tiempo, casi llegué a olvidar por creerlo inalcanzable.
Autora: Tengo también pensado hablar de mí, porque bueno, para algo es mi blog y porque siempre me resulta enriquecedor conocer a la persona que está detrás de las entradas que leo. Probablemente estas sean las menos, pero aquí me gustaría hablaros de asuntos como los proyectos que tengo, eventos a los que asisto -que sean pertinentes al blog, pero soy un ser bastante monotemática, así que no os preocupéis de eso-, cosas que aprendo que por motivos temáticos no entran en las categorías anteriores…
En fin, eso es todo. Como veis, estoy perfeccionando el arte de ir directa al grano. Espero teneros conmigo en este nuevo viaje, aunque antes de marchar me gustaría preguntaros sobre una duda que tengo. ¿Creéis que es buena idea que deje el nombre del blog tal cual está -no el de la barra de direcciones, sino lo de Desde Macondo a Nunca Jamás – o que mejor cambie mi nombre, para que sepáis quién demonios soy?
Y ahora sí: ¡pasad un buen día y una gran semana!